Febrero 3 / 2014
CÚCUTA 0 – AMÉRICA 1
UNOS MOROCHITOS VESTIDOS DE NEGRO...
Mientras el equipo ingresaba a la cancha era inevitable rememorar cuando de la misma forma, grandes jugadores colombianos y figuras internacionales desfilaban con esta camiseta camino a una cancha que por más hostil e intimidante que fuera, siempre albergaba la jerarquía de los jugadores del rojo, de esos que dejaron huella. Hoy es diferente, la situación económica y los fracasos recientes han forzado a la austeridad y a la juventud, la apuesta es diferente. Uno a uno ingresaban a la cancha un grupo de entusiastas morochitos vistiendo un atuendo negro muy sobrio. Sus rostros asustadizos reflejaban ansiedad y nerviosismo pero hambre de gloria y un deseo inmenso de trascender y dejar su propia huella. Hoy, ellos están defendiendo esta camiseta que usted y yo tanto amamos.
Los primeros minutos del partido fueron para el local que buscaba imponer su juego atropellado en la mitad del campo, donde rápidamente se consolidaron ante la imprecisión y nerviosismo de los nuestros; Balanta marcaba por delante, Palacios corría sin rumbo, Sierra y Charrupí estaban muy juntos y los centrales lucían torpes. Aunque no permitieron opciones al rival, el equipo no estaba cómodo y en ataque era poco lo que ofrecía; no estaba claro el panorama. Pero llegó el minuto 30 y a partir de allí el hechizado rumbo en vez de oscurecerse, empezó a iluminarse; el equipo se compactó y los morochitos dejaron atrás la timidez y sintieron el punzón del banco y de la tribuna. Yamilson pateó abajo cerca del palo, Henao la estrelló contra el otro, Peñaranda la tuvo pero no creyó en su remate y Yamilson de mitad de cancha por poco anota uno antológico. La Mecha cerraba muy bien el primer tiempo.
Foto: www.torneopostobon.com.co/
Iniciando el complemento Cúcuta fue más agresivo, pero se encontró en el arco con un auténtico monstruo que evitó el gol en dos muy buenas atajadas que fueron el preludio a una jugada extraña en el área sancionada como penal. Viera, como un americano más, de esos que han sufrido con estos colores por mucho tiempo, se paró frente al balón y le rompió el arco a su colega. ¡GOOOL HP! Brazos arriba del animal que recibía fervoroso con toques en la cabeza a sus compañeros. El local se volcó en busca del empate y los morochitos que hemos estado mencionando soportaron la embestida con coraje y guëeeevos, con errores pero corriendo y metiendo, derramando chorros de sudor; como debe ser. Desde la táctica el equipo también se protegió, adentro Tapiero para ayudar a Balanta por izquierda y Mendoza para aprovechar un inminente contragolpe y sostener el balón. El partido se cerraba al tiempo que la ilusión nuevamente abre imponente sus alas. Un nuevo comienzo; ganamos bien.
¡Gracias morochitos, con mucho afecto! ¡Gracias de verdad por esta victoria! ¡Gracias!
El calendario avanza hacía Cali el día jueves y si usted leyó esto o vio el partido, entonces entenderá que es su deber ir al Pascual y llenar de confianza a este grupo de muchachos que hoy defienden estos colores franqueando en cada fecha nuestro destino. Hay muchas cosas por mejorar pero la actitud con este América 2014, parece que no se negocia.
Saludos!
MAURICIO BERMÚDEZ
@MBER226