Julio 25 / 2015
VALLEDUPAR 1 -- AMÉRICA 1
UN EQUIPO DE 45 MINUTOS. . .
"Sos de la B me gritan, sos de la B me cantan; como si no lo supiera"
Con Lara el resultado 1-2 y fue que la cancha y el clima. Con Umaña un pálido 0-0 y fue que la cancha y la temperatura. Con J.J López otra vez 1-2 y fue que la cancha, la demora, la lluvia, el fango, el árbitro y la teoría maldita. . . Hoy con el general ya sabíamos lo que se venía.
La aborrecible plaza de Valledupar que cedió al fútbol sus bases, jardines y cajas de bateo, recibió a un equipo golpeado por el resultado anterior que planteó un esquema rácano, timorato, un planteamiento para enfrentar al Junior del 93 y no a este, quizás el más débil Valledupar que nos ha tocado. Las ondas sonoras que llegaban de la cancha daban cuenta de un partido soso con algunas opciones de gol pero con el fútbol lejos de los pies de los jugadores de rojo.
El trol Largacha, un jugador pésimo para mi gusto, pifió y pifió hasta servir el gol de Valledupar. Silencio momentáneo. Otra vez perdiendo en esta cancha, y tragándome el sabor de una derrota a la distancia. ¿Por qué? ¿Por qué no intentar jugar de frente a estos rivales de la B? ¿Por qué la mezquindad? En el epílogo de la primera parte Ayron cazó un rebote y marcó el empate liberado un poco el veneno contenido.
El América recargado que nos han venido vendiendo se retiraba de la cancha sin la R de su adjetivo. Se retiraba de nuevo regalando 45 minutos; en eso si que ha sido constante la banda de Velasco.
Gran primer tiempo de Canosa escuché y leí por doquier.
Cuatro atrás para el segundo tiempo. Restrepo al medio campo y una actitud renovada por el cambio de módulo. El equipo mejoró siendo incisivo deduje de la narración local y visitante. Sin embargo el rival atacó produciendo algunos –Nos salvamos vé— que como alfileres entraban al oído. ¡VAMOS ROJO! Empujaba a la distancia. El equipo al parecer mostraba deseos de ganar. Farías con la más clara, Canosa empujando de atrás y Ayron siempre peligroso. No podía dejar de preguntarme por qué regalamos de nuevo 45 minutos. El otro uruguayo y Cortés escribieron su debut en el potrero dibujando un rojo más combativo y comprometido.
Al final un penalti sobre Hernández no fue sancionado y la esperanza de por fin derrotar a Valledupar a orillas del Guatapurí se esfumó. Fin del partido. Desconecté la peculiar transmisión local y a mitad del discurso repetido del general abandoné la propia. Recogí mis equipos lamentando un poco resultado y antes de volver a la reuniòn familiar me entregué una lamentable conclusión: Los rivales se preparan para enfrentar en 90 minutos a un equipo vestido de rojo que desperdicia por pretensiones tácticas 45 valiosos minutos.
Gran segundo tiempo de Canosa. Gran partido de Canosa escuché y leí por doquier.
Saludos y gracias por leer estas líneas.
MAURICIO BERMÚDEZ --- @MBER226