ESTAMOS ORGULLOSOS PROFE. . .

28.09.2015 23:52

Septiembre 20 / 2015

            UNIÓN 2 -- AMÉRICA 2   

 

 

ESTAMOS ORGULLOSOS PROFE. . .

 

                            "Sos de la B me gritan, sos de la B me cantan; como si no lo supiera"

 

Bueno, a lo lejos de nuevo, esperando que de repente salgan del radio entre toques antológicos los goles del rojo.  Lleno de esperanza en el equipo y con la convicción plena del buen resultado el inicio de juego salió al paso en la voz eufórica del relator.  ¡Vamos rojito de mi corazón!

El rojo parecía no encontrase en la cancha mientas que su rival aprovechaba esa condición para llevar riesgo a nuestro arco.  Néider y los de ataque eran secundarios en el relato, el equipo no se sacudía de esos primeros minutos intensos del Unión que encontraron premio en un penal que desde la cabina se gritó como inexistente.  Peto no llegó; gol de Unión.   Un partido inesperado enfrentaba el profe Suárez; abajo en el marcador y sin el balón en su poder.  Una jugada de Farías que desde la cabina se reclamó como penal, fue el guiño más cercano del rojo al empate que no llegó y sirvió de preludio al segundo de Unión; el panorama se tornaba gris como la tarde cienaguera.  —Nos van clavando 2-0 vee— Sentenció el narrador.

 

Había que descontar, había que reaccionar.

 

Entonces de la nada, como un pase de Néider, la publicidad política pagada fue interrumpida por el sonido que anhelaba desde el inicio del juego: del roooojazo, del rooojazo, del roooojazo , de tu rooojazo, Amééééééééééééérica.  El gol como música celestial invadió cada uno de mis sentidos bañados de rojo y la esperanza de revertir las adversidades de hoy.  Fin del primer tiempo.

El profe Suárez envío a la cancha a Yesus en lugar de Néider; cambio arriesgado y acertado: al parecer el rojo ponía condiciones y lucía más fuerte en la cancha. La lluvia asomó y con ella la vorágine en la que se convirtió el equipo.  El relato daba cuenta de un equipo aguerrido, comprometido con nuestra causa peregrina; Farias la tuvo clara, —Se salvaron vee— y luego se volvieron a salvar.  Era imposible no emocionarse. ¡Vamos! ¡Vamos! América estaba montado en el juego.

 

Lucumí con pocos segundos en la cancha desvío el balón al fondo provocando éxtasis total.   Golazo, golazo que se sintió en cada corazón escarlata que palpitaba convencido de la remontada. 

El rojo seguía, no daba tregua, esto sí es América, ¡Vamos carajo! Sobre el final un remate certero del mismo Lucumí era el clímax de una tarde épica, de esas que recordaremos el próximo año dando la vuelta en primera, por desgracia Solís desvió el remate firmando así el definitivo 2-2.  Cómo no voy a creer si a través de la radio puedo sentir la verraquera del equipo, la actitud al servicio del fútbol.

 

Sobre el final el profe  Suárez nos entregó algo que hace tiempo esperábamos de quienes visten nuestra camiseta: “Hoy les tengo que decir que se sientan orgullosos, estos muchachos dejaron todo esta tarde” Estamos orgullosos profe.

 

Saludos y gracias por leer estas líneas.

 

 

MAURICIO BERMÚDEZ --- @MBER226

 

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