¡VAMOS AMÉRICA, VAMOS!
(23-09-2017)
ONCE CALDAS 0 - AMÉRICA 0
¡VAMOS AMÉRICA, VAMOS!
Ni siquiera había podido digerir la frustración de ver lo que se tragó Silva, cuando acto seguido, el balón de nuevo caía lento sobre su cabeza a unos cuantos pasos de la raya de gol. Cerré los ojos. Inhalé ese aire pesado y tóxico que respiramos los americanos por estos días. Es imposible que lo falle. Abrí los ojos, aun con el aire denso en los pulmones… – Se lo comió otra vez – ¡HIJUEPUTA!
¡Cebooo! ¡Cebooo!
Que alguien le grite a Botinelli, Arboleda, Silva y Martínez Borja que el partido inició hace 46 minutos. El primer tiempo les pasó por encima. No entendieron la importancia de esta noche de septiembre y cayeron en el sopor de semanas atrás. Blanco y Vásquez empujaban al equipo pero sus esfuerzos caían en el suelo árido de sus compañeros. El primer tiempo para desgracia nuestra, se disolvió en una infusión de impotencia que eleva exponencialmente los niveles de angustia. Había que ganar. No solo por seguir la línea de Jaguares sino para recibir la próxima semana a Tuluá a solo cuatro puntos y meterlo de una vez por todas al baile que quisieron abandonar.
El entrenador sacó a Silva y envió a la cancha a Loboa envuelto en una pachorra indignante. Otro palazo – Nos salvamos – Adentró Fernández por Arboleda. El equipo mejoró pero el temor de perder a veces es más fuerte que la convicción de ganar. Palacios decidió ir al ataque y rompió. Martínez Borja sacó un derechazo de la nada que por un par de centímetros no sacudió los nevados. La sensación de ganarlo desplazó la ansiedad. Botinelli filtró un pase de esos que se ven en sus videos promocionales de YouTube. Palacios de primera centró por el suelo a la llegada de Loboa…. El momento del abrazo parecía haber llegado. El gol y el sacudón a la tabla del promedio también. Loboa, llegó al balón, sin marca, sin presión y de zurda con algún tendón al revés lanzó el balón por encima. – Se lo comió este tronco –
No hubo abrazo. No hubo gol. No hubo explicación ni paz. Fin del partido.
Será una lucha domingo a domingo contra la impaciencia y el desespero. Aunque estoy seguro que no vamos a perder la categoría no escampará hasta la última fecha. Serán dos meses largos y estresantes de sumas, restas y combinaciones de resultados. Por lo pronto, se viene una semana con la cruz de nuevo a cuestas, días en los que todo molestará y putearemos cada vez que aparezcan en la memoria como taladros los desperdicios de Silva y Loboa. Hasta que llegue el domingo con la cabeza en Montería, el deseo en Pasto y el corazón saltando en el Pascual gritando dale rojo, hoy te venimos a alentar, para ser campeón hoy hay que ganar.
No vamos a descender, estoy seguro, pero sufriremos más de la cuenta. Hasta el minuto 94 de la fecha 20 por allá en el viejo y querido noviembre. Allí en medio de americanos infartados, alentaremos sin parar. ¡VAMOS AMÉRICA, VAMOS!
Saludos y gracias por leer estas líneas
MAURICIO BERMÚDEZ / @MBER226